Menos mal que el equipo de Gobierno ha dado marcha atrás, aunque sea a medias, todo sea dicho. Alguien debería decirle a Adrián Martínez de Pinillos, concejal de Participación, que cuando le pregunten por algo que no conoce o que no ha podido consultar con el resto del equipo de gobierno, debería contestar la típica frase de "lo estudiaremos" o "lo estamos estudiando". Porque, claro, con la inexperiencia, la ignonarancia o la inocencia, como prefiere el Alcalde, mete la pata hasta el cuadril. Alarmó a una parte importante de esta ciudad al decir que las barbacoas del Trofeo se celebrarían en toda la playa, en vez de mantener el espacio reducido como hasta ahora. Así que le concejal de Medio Ambiente, Manuel Gonzalez Bauza, salió inmediatamente a corregirlo. Se ampliará el espacio a disposición de los usuarios en 200 metros. Error. ¡Ahora que habíamos conseguido por la presión ciudadana limitar el espacio y deshacer la barbaridad cometida por el anterior gobierno municipal de hacer de las barbacoas una fiesta insoportable! Porque parece que ya nadie se acuerda de ese año 2000 con el gobierno municipal llamando a batir el récord de porqueria en nuestras playas ese día.
Ciertamente, las barbacoas eran una fiesta popular y familiar, volver a su origen costará todo por la desidia del anterior gobierno municipal. Así que espero y deseo que el actual coja bien el camino.
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