Que recuerde la última vez que el grupo socialista llevó a pleno la modificación del nomenclator del callejero de la ciudad fue en julio de 2012. En aquel pleno ordinario, mis compañeras de bancada Marisa de las Cuevas y Carmen Zurita formalizaron una propuesta para planificar las exhumaciones de las víctimas franquistas que yacen en el Cementerio gaditano, por un lado, y la modificación de la denominación de las calles cuya nomenclatura correspondía a personas ligadas al golpe de Estado del 36 y a la dictadura franquista, por otro. Arduo fue el debate. Mis compañeras se emplearon bien desde su ideología contra la rancia derecha. En el acta de la sesión plenaria quedará para el recuerdo la expresión que utilizó Ignacio Romaní hasta en tres ocasiones: "memoria histérica". El no, imperó en esa sesión, como en cualquier otra, como por ejemplo en la de septiembre de 2010 cuando esta misma iniciativa corría a cargo de mi compañero Luís Ben.
Ahora el nuevo gobierno municipal lo pone en agenda. Las exhumaciones, la recuperación de los cuerpos y la restitución de las víctimas, también. Y yo lo celebro. Porque es de justicia y porque supone el cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica. Ni caso a la contariedad el PP, que aún se tiene que ubicar en su posición de oposición. Puesto que algunos de esta formación representan a aquella derecha trasnochada que pide la legitimidad de las leyes cuando le interesa y descarta, mostrándose en rebeldía, ante aquellas que remueven su conciencia. Y de la Fundación Francisco Franco ¿qué decir? Que no sé como no está ilegalizada.
Así que sin miedo, a modificar el callejero y a cambiar el nombre del Estadio, motivos hay. Y si no, lean lo publicado hoy en Cádiz Directo sobre la figura de Ramón de Carranza.
Así que sin miedo, a modificar el callejero y a cambiar el nombre del Estadio, motivos hay. Y si no, lean lo publicado hoy en Cádiz Directo sobre la figura de Ramón de Carranza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario