Estos días en el periódico La Voz de Cádiz leía un artículo sobre el número de calles que en nuestra ciudad llevan nombre de mujer. El nomenclator es parco en esta cuestión, quizás en parte porque las mujeres históricamente ocuparon un 'segundo lugar' y en parte porque nunca se ha querido reconocer a aquellas que por su valentía, que por adelantarse a su tiempo, hicieron historia visualizando el potencial que para la sociedad podían suponer. Señala la autora del artículo que sólo el 6% de las 736 calles de Cádiz están dedicadas a mujeres, la mitad de ellas llevan el nombre de religiosas, vírgenes o santas.
Recordé al leerlo la iniciativa que mi buen amigo Luís Ben presentó en el pleno municipal en 2010. El estudio que ahora hace Miren Landeta, lo hizo él, en un tiempo en el que las políticas de igualdad importaban, un tiempo en el que el grupo socialista aportaba su grano de arena para visualizar a las mujeres. Claro está, como ahora, aquella iniciativa quedó para el recuerdo con el voto negativo del Partido Popular.
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