El verano más complicado de Teófila

Publicaba hoy el Diario de Cadiz un artículo que titulaba "El PP afronta su fin de mandato más complicado". Dos motivos da este medio para afirmar que el PP afrontará esta última parte del mandato municipal con mayor dificultad: la crisis social y económica que vive la ciudad como el resto del pais y las voces criticas contra la gestión del PP en el Ayuntamiento. 

La crisis económica hace tiempo que afecta a los vecinos de mi ciudad, sin que el Ayuntamiento haya puesto ni una sola medida en marcha. No en vano en 2011 eran casi 16.000 los desempleados de Cádiz, con una situación que diferencia a la de ahora. Entonces la población había descendido en 25.000 gaditanos que habían tenido que marchar de Cádiz para buscar oportunidades de empleabilidad fuera de nuestra ciudad. Hoy mucho de los que se marcharon han regresado y viven en Cádiz al amparo de sus padres, madres e incluso abuelos y abuelas. Lo que ha hecho que a la crisis económica gaditana se le una una crisis social, que ha llevado a muchos de ellos a la exclusión social o al borde de la pobreza extrema. 

En cuanto a las voces criticas, éstas siempre han existido, siempre ignoradas por el gobierno municipal y en muchos casos por los medios de comunicación gaditanos. Por ello, lo que no tuvieron fue el altavoz que hoy ofrecen las redes sociales ni el que supone que un vecino, Fernando Pedemonte,  pacientemente grabe pleno tras pleno. Porque en los seis años que llevo de concejala he visto en todos los plenos demandas ciudadanas, no solo de particulares que venían a exponerle su situación a la Alcaldesa sino de colectivos como las trabajadoras de la limpieza que ya alzaron su voz en 2009. Ahora los gaditanos demandan más información porque ya no hay quien oculte, o quienes ocultaban hasta ahora ya no lo pueden hacer porque en las redes sociales corre como la pólvora cualquier información sobre el destino que tiene el dinero público de nuestra ciudad. Y esto ha generado indignación. Recuerdo como en la campaña electoral de 2011 iba documento en mano contando a todos los vecinos con los que tenía un encuentro en que gastaba la Alcaldesa sus impuestos. Con la boca abierta se quedaban, y se convertían en voces criticas cuando conocían esto que era casi imposible de contar o casi imposible de trasladar a la generalidad de los gaditanos. La informacion que llegaba vía medios de comunicación era aquella que al equipo de gobierno interesaba, bien a través de Onda Cadiz bien a través de los medios privados que difícilmente  publicaban, por ejemplo, que 2011 se cerró con una deuda financiera de 150 millones de euros y con un pendiente de pago de proveedores de 132 millones de euros. Quizás porque "económicamente" no interesaba, porque en este pendiente de pago a proveedores estaban numerosas facturas por publicidad a los medios de comunicación no solo gaditanos sino del resto de pais. De hecho en el presupuesto de 2012 se reconocieron facturas a los medios que no tenían consignación presupuestaria de años anteriores por importe de 764.000 euros. 

Durante todos estos años los socialistas hemos sido muy críticos, sobretodo con dos datos que rueda de prensa tras rueda de prensa dábamos: la ocho millones de euros que el gobierno municipal gastaba anualmente para pagar publicidad y propaganda y con los tres millones y medio de euros que costaba Onda Cádiz. Pero eso, desgraciadamente no tenía altavoz. Digo desgraciadamente, porque hace tiempo que los gaditanos se hubieran dado cuenta que el engaño era la estrategia de su Alcaldesa, del Equipo de Gobierno. Ella fue siempre tan intolerante. Siempre se ha puesto crispada ante la critica hacia su gestion. Y parece que ahora sorprende, a quien no lo sabía o a quien no lo contaba. A nosotros, a los socialistas, no nos sorprende. Es así, autoritaria. 

Hoy, las redes sociales y como digo el esfuerzo de algunos gaditanos van a hacer que la realidad sea conocida y a esto debe unirse de una vez por todas el altavoz más potente que tiene una sociedad democrática desde hace dos siglos: la obligación que tienen los medios de informar con veracidad. Me indignan las medias verdades...