El viernes pasado la Alcaldesa puso fecha a aquello que no debía hacer por incumplir el PGOU: el derribo de la finca en la calle Cruz 11. La Asociación de Vecinos Cádiz Centro ponía la voz de alarma. El Ayuntamiento autoriza el derribo de fincas protegidas sin inmutarse. Y lo que es peor, mintiendo a diestro y siniestro. En el caso de Cruz 11, el proyecto de ejecución de la obra refleja que la finca podrá ser derribada al carecer de protección. Falso, el PGOU señala nivel de protección 3.
El pasado mes de mayo pregunté en pleno por el derribo de esta finca y José Blas Fernández contestó que era posible porque la licencia de obra se había emitido conforme al anterior PGOU. Falso, existía una licencia de obras que caducó y así fue acordado por la Junta de Gobierno Local el 14 de enero de 2011. Esto significa que la nueva licencia de obra debió ser autorizada con el nuevo PGOU, y jamás debería autorizar el derribo.
Pero lo más increíble, dice el gobierno municipal como excusa que la finca está en tal estado que se tiene que derribar. Lo que no dice el PP es porque llegan a este estado... Porque el Ayuntamiento no exige con la contundencia necesaria las obras de seguridad, ni requiere a los propietarios para que adecenten sus fincas... Y finalmente, et voila, sale una compraventa de la chistera municipal... Y a saber el precio que se pago por ella.
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