Cadiz videovigilada

Hace tiempo que el gobierno municipal empezó a instalar cámaras por todos lados. Son muchas las dependencia municipales que las tienen instaladas: el complejo deportivo "Ciudad de Cádiz", el Palacio de Congresos, el Ayuntamiento -no solo el exterior del edificio, sino también en el interior por ejemplo los pasillos de la primera planta donde están los despachos de los grupos políticos-. Se han colocado también en los autobuses. Y ahora pretenden instalarlas en la Cárcel Real, el Museo Litográfico la Piscina de Astilleros, el Parque de Astilleros, ECCO, el Museo de Iteres Entrecatedrales, Teatro Falla, Centro de Asuntos Sociales de la Barriada de la Paz, el edificio Mirabal, la guardería de Astilleros, la Casa de la Juventud y la Guardería Dora Reyes -preocupante en estas tres instalaciones porque se estarían grabando imágenes de menores-.

Siempre me ha parecido que la colocación a diestro y siniestro de cámaras en la vía publica y en las dependencias administrativas, en este caso, municipales, debe ser residual, solo en los supuestos en los que esté justificado por motivos de seguridad -por ejemplo, la Jefatura de la Policía Local-, porque puede vulnerar la libertad y la intimidad de las personas, todo ello sumado a que Cádiz no es una ciudad especialmente insegura.

Pero lo que más me sorprende es como el gobierno municipal instala cámaras por todos los lados y no cumple con la normativa. Una de las normas indispensables es que se ha de situar un cartel indicativo de que existen cámaras -ni uno de los edificios que he mencionado lo tienen-, de este modo, los ciudadanos podrán saber que se trata de una zona videovigilada.

Otra cuestión será qué empresa instala y se hace cargo del mantenimiento de esas cámaras.